El remarketing, ese gran desconocido que todos conocemos

Creeme, tú ya sabes lo que es el remarketing

¿No me crees? ¿Sigues pensando que no sabes lo que es el remarketing? Bien, te pondré un ejemplo que muy probablemente te haya pasado en alguna ocasión. Estás mirando comprar una lavadora y tras mucho investigar en diversas webs, te decantas por una, y al de un mes escaso, la web donde compraste la lavadora te manda un mail indicándote que ese mismo modelo que tu compraste está rebajado un 40%. ¿No tiene mucho sentido, verdad? de hecho, es muy probable que te quedes con un mal sabor de boca al leer ese mail dado que por una parte estás recibiendo una oferta de algo que ya has comprado y por otra….¿cada cuanto cambiamos algo como una lavadora? Te compraste una en Mayo y pretenden que te compres otra en Junio? Este sería el ejemplo de un MAL remarketing puesto que no se está teniendo en cuenta la situación individual del comprador a quien se ha enviado la oferta o promoción.

 Pongamos ahora el ejemplo de un BUEN remarketing. Supongamos que acabas de comprar una serie de juguetes para tu perro en una web, y que al de un mes te llega un mail indicándote que hay algunos artículos para perros que no son juguetes que están rebajados (pongamos por ejemplo chubasqueros). Fijémonos que en este caso, el vendedor sabe por una parte que eres propenso a gastar dinero en tu perro y sabe qué articulos compraste hace un mes y por lo tanto, no te ofrece esos mismos productos (y mucho menos si están más baratos ahora). Tiene todo el sentido del mundo que te informen sobre la rebaja de esos nuevos chubasqueros puesto que  es algo que no tienes y en base a tu perfil, eres un comprador potencial de esos productos que te están ofreciendo.

Por poneros un ejemplo más cercano y real, en Bost Marketing cuando a un cliente se le termina el soporte de mantenimiento de alguno de nuestros planes, no les ofrecemos un nuevo plan, lo que hacemos es ofrecerles la opción de adquirir nuestros paquetes de horas para continuar con el mantenimiento en caso de necesitarlo.

El poder del remarketing

Sin duda alguna, el remarketing es un arma muy poderosa si se usa adecuadamente. Gracias a ella se puede hacer un estudio y un seguimiento prácticamente personalizado de cada uno de nuestros clientes o de grupos de clientes que siguen un mismo patrón. Es importante destacar que pese a que el remarketing, como su nombre indica, trata de volver a aplicar el marketing sobre alguien que ya nos ha comprado previamente basándonos en lo que sabemos ahora de él, también puede aplicarse para captar nuevos clientes gracias a toda la información que recopilan las redes sociales. No es casualidad que una persona que ha dado «like» a 50 publicaciones con el hashtag #zapatillas, le aparezcan como sugeridas cuentas relacionadas con venta de calzado Air Jordan.

Está más que demostrado que esta técnica consigue un ratio de conversión bastante alta y es que esta técnica podría definirse básicamente como «afinar el tiro», y es que no solo se basa en tener en cuenta las compras ya realizadas por la persona, si no que también  se tienen en cuenta variables como los atículos que ha estado ojeando en nuestra web, el tiempo que ha pasado en cada artículo o categoría o incluso el estado de su carrito de la compra. Una práctica cada vez más habitual es recordarle al cliente (con cierta gracia, eso si) que en su carrito hay ciertos artículos pendientes de ser comprados.

Conoce a tu clientela

Desde la perspectiva del inbound marketing, el remarketing es un método muy potente para volver a atraer a aquellos usuarios que, pese a llegar a entrar en nuestra landing page, no terminaron su conversión a registro o lead. Hacer un buen uso del remarketing puede suponer la diferencia entre que un cliente se sienta perseguido e irritado con tus newsletter de ofertas que no le interesan, o que se sienta arropado y agradecido por ofrecerle cosas que realmente tienen interés para él. Todos los datos que se recogen con polémicas cookies cobran un nuevo sentido si se utilizan de la manera correcta, de manera que si tienes o estás pensando en tener un e-commerce, no dudes en hacer uso (con responsabilidad, eso si) de esta práctica técnica con tus clientes.